Si quieres conservar tu salud mental, dejar atrás las tensiones por la acumulación de quejas, inquietudes, confidencias que a través de la interacción con tu familia vas acumulando, es necesario hacer ejercicio físico a diario. Para mí, esto es algo nuevo, pues la verdad después del colegio he llevado una vida muy sedentaria, lejos del ejercicio. Recibí esta recomendación de la actividad física cuando consulté a una experta en salud mental sobre cómo no enloquecer con tanta carga emocional que vas recibiendo a largo de los días, cuando vas escuchando a diario a tu familia, actuando como terapeuta. El ejercicio es básico, te permite descargar adrenalina, generar endorfinas, tomar aire, distancia, ver otra perspectiva y recordar que no estás a cargo de solucionar todo lo que te presentan, que no hay que tomar las cosas personalmente y que todo encontrará su curso. Así que ahora, estoy haciendo ejercicio a diario, dándome la oportunidad de descargarme emocionalmente y quiero invitarte a que hagas lo mismo.