A veces podemos soñar con grandes logros, con reconocimiento de los demás, con dedicarnos a cosas extraordinarias o llamativas. Y olvidamos e incluso despreciamos lo que vivimos en lo cotidiano de nuestro hogar. Los platos que lavamos, los pañales que cambiamos, las pequeñas conversaciones. Y sin embargo esas pequeñas cosas, pueden ser lo que realmente es significativo, lo que nos da vida y aire psicológico. Chris Stefanick en su video Hidden King, del martes 15 de junio de 2021, nos presenta a San José, el padre adoptivo de Nuestro Señor, como el ejemplo de vida sencilla y oculta con una misión maravillosa desde lo cotidiano. Y esto, me hace pensar que es verdad, en lo sencillo y cotidiano de nuestras tareas diarias es donde encontramos paz, sentimos balance, amamos a Dios y a nuestros próximos. Amar lo cotidiano y sencillo y apreciarlo, porque es vida bella.
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